El Cucamelon (Melothria scabra) es una pequeña y dulce fruta que se parece a las sandías pero en tamaño es similar a las uvas, con un sabor a pepino bañado en lima. En este artículo te enseñamos a propagar, cultivar cucamelon en maceta y sus cuidados.
Propagar Cucamelon
Como las plantas de cucamelon no son muy populares, puede ser difícil encontrar sus semillas en una tienda o vivero local.
Por eso es preferible utilizar plántulas ya establecidas en lugar de semillas. Pero si tienes o consigues semillas a continuación vemos cómo sembrarlas.
Cuando los frutos maduros se desprendan de la planta, guárdalos en un lugar fresco. Al cabo de dos semanas, corta el fruto por la mitad y recoge las semillas.
Guarda estas semillas en un tarro lleno de agua durante una semana. Después, sécalas en una toalla de papel; ¡ya está! Tus semillas están listas para ser sembradas.
Puedes comenzar a sembrarlas cuando haya pasado todo riesgo de heladas en tu región, a principios de la primavera.
Siempre es una buena idea sembrar las semillas directamente en el lugar deseado o en macetas separadas ya que no tolera bien el trasplante.
Maceta ideal para cultivar Cucamelon
Puedes cultivar una o dos plantas en una maceta de 15 a 20 litros (30-35 cm de ancho y profundidad). Una maceta de 60 cm es buena para cultivar 3 o 4 plantas de cucamelon.
Asegúrate de que el recipiente tiene suficientes agujeros de drenaje. Enmienda la tierra con abundante materia orgánica.
Si cultivas varias plantas, mantén las macetas separadas entre sí 30 y 60 cm para que tengan suficiente espacio.
Condiciones para cultivar Cucamelon en maceta
Ubicación
Los cucamelones prosperan en condiciones más cálidas. Debes plantarlos donde reciban al menos 6 horas de luz solar al día. Si se plantan a la sombra, los frutos serán menos abundantes.
Suelo
Al igual que todas las plantas frutales, los cucamelones también necesitan un suelo rico en nutrientes, suelto y con buen drenaje.
Puedes utilizar materia orgánica y compost.
Condiciones climáticas
El cucamelon prefiere las condiciones de crecimiento cálidas, pero esto no significa que no se pueda cultivar en climas más fríos. Plántalos cuando hayan pasado los peligros de las heladas.
Cuidados del Cucamelón en maceta
Riego
Incluso en condiciones climáticas calurosas, los cucamelon no necesitan ser regados diariamente, gracias a su capacidad de almacenar agua en sus raíces en forma de tubérculos. En climas cálidos, puedes regar la planta una vez a la semana.
Durante los días fríos o cuando la niebla y las nubes obstruyan el sol durante un periodo prolongado, riega las plantas sólo cuando la capa superior del suelo esté seca.
Nota: El riego excesivo puede provocar la descomposición de las raíces, así que evítalo.
Utiliza un enrejado o una jaula de alambre
Los cucamelones pueden crecer hasta 2 o 3 metros de longitud y necesitan una estructura estable y robusta para prosperar. Puedes instalar un enrejado o alambre en forma de malla o jaula.
Esto no sólo actuará como estructura de soporte, sino que también te ayudará a cultivar cucamelon en macetas de la forma que desees. Además, el enrejado también te ayudará a mantener el tallo y los frutos alejados del suelo.
Fertilizante
El mejor momento para abonar la planta es cuando empiezan a aparecer las flores. Utilizar emulsión de pescado en pequeñas cantidades, una vez a la semana, es un buen comienzo. Esto hará que la producción de cucamelones siga siendo prolífica. También puede utilizar harina de huesos.
Evita el uso de fertilizantes con alto contenido en nitrógeno, ya que podrían dificultar la producción de frutos de la planta.
Plagas y enfermedades
Sorprendentemente, los cucamelon no son propensos a las plagas y enfermedades. Siempre que estén fuera del suelo.
No requieren medidas de control de plagas. ¡Sí! ¡Has oído bien! Por razones desconocidas, las plagas dejan en paz a los cucamelones, ¡e incluso los pájaros se alejan de ellos!
Cosechar cucamelon
Los frutos empiezan a aparecer justo después de 2 ó 3 semanas de floración. Recógelos cuando estén bien firmes.
La recolección de los cucamelones no difiere de la de los pepinos. También son muy fáciles de almacenar, gracias a su tamaño. Siempre que los mantengas a temperatura ambiente, se conservarán bien.
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Sin embargo, con el tiempo, perderán su carácter crujiente. Recoge algunos frutos un poco antes de su época de fructificación, ya que aumenta la producción.