El Caladium, también conocido como Caladio, Corazón de Jesús, Paleta de Pintor o Corazón herido es un gran género de plantas perennes tropicales con más de 1000 variantes. Estas plantas de hoja ancha pueden aportar un toque de color espectacular o sutil a cualquier espacio. En esta guía te enseñamos a cultivar caladium y todos sus cuidados.
Dónde cultivar caladium
- En el interior, en un lugar bien iluminado y alejado de la luz solar directa.
- En el exterior, en un clima cálido, donde pueda recibir parte de la sombra.
Cómo propagar caladium
El mejor método para propagar el caladium es la división. Sin embargo, debes tener precaución al propagar los caladiums porque pueden causar intoxicaciones y reacciones al contacto o la ingestión.
El mejor momento para propagar una planta de caladium es en la primavera.
Al igual que en la división de otras plantas, debes cavar alrededor del perímetro de la planta para que el levantamiento sea más cómodo. Puedes aflojar la zona con una pala y levantar los tubérculos de la tierra.
Retira la tierra y las partes dañadas, como el follaje y los brotes, para evitar que se propaguen a las divisiones sanas.
Replantando el caladium
Antes de plantar las divisiones, conviene cortar y levantar la yema central más grande de un tubérculo.
Esta técnica dará lugar a una planta más completa y tupida porque las yemas más pequeñas restantes crearán más brotes.
Puedes plantar las divisiones en un suelo fértil, húmedo, con buen drenaje en el invernadero para asegurarte de que no se expongan a la luz solar directa.
Lo mejor sería un máximo de seis horas al día para que las plantas se establezcan. Pero si estás en el exterior, comprueba la calidez del suelo porque los caladiums prosperarán entre los 18 y 26 °C, que es lo que hay en primavera.
Planta los tubérculos de caladium con las yemas hacia arriba, y con una separación de 30 cm entre ellos a una profundidad de 5 cm.
Cultivar caladium en una maceta
Elige una maceta de al menos 20 cm de ancho y de profundidad (o más grande, según el tamaño de tu planta).
Llena parcialmente la maceta elegida con una mezcla de calidad.
Saca la planta de la maceta, separa suavemente las raíces y corta las que estén rotas o enredadas.
Colócala en la nueva maceta y rellénala con la mezcla para macetas, reafirmándola suavemente. Riega bien.
Riegue de vez en cuando, dejando que la planta se seque ligeramente entre los riegos.
Alimenta quincenalmente desde la primavera hasta el otoño con el alimento líquido para plantas.
Cultivar caladium en el jardín
Elige un lugar bien drenado y parcialmente sombreado en el jardín y prepara bien la zona de plantación, quita las piedras grandes que pueda haber y agrega un poco de compost.
Cava el hoyo de plantación el doble de ancho y a la misma profundidad que el cepellón (raíces). Saca la planta del contenedor con cuidado.
Colócala en el hoyo y rellénala con tierra, reafirmándola suavemente. Riega siempre bien después de la plantación para asentar la tierra alrededor de las raíces y mantén la tierra húmeda durante varias semanas mientras la nueva planta se establece.
Cubre ligeramente con un mantillo orgánico, como virutas de corteza, recortes de hierbas o paja, y riega bien.
Riega una o dos veces por semana, según las condiciones meteorológicas, para mantener la tierra ligeramente húmeda.
Consejos de cultivo
Mantén las hojas limpias limpiándolas con un paño húmedo.
Se sabe que todas las partes de la planta de Caladium son toxicas. Ten cuidado al plantar, podar y sobre todo con los niños y mascotas.
Elimina los tallos muertos de la base de la planta para favorecer un aspecto limpio y cuidado.
Cuidados del Caladium
Luz
El caladium se desarrolla mejor con una luz indirecta brillante o medio brillante. Puede tolerar el sol directo de la mañana, como en una ventana orientada al este.
Evita las zonas en las que estará expuesto al sol de la tarde, sobre todo en verano.
Riego
Riega tu caladium cuando los dos o tres centímetros superiores del suelo estén secos. Riega a fondo y asegúrate de vaciar el platillo de cualquier exceso de agua para evitar que se pudran las raíces.
Cuando la planta entre en reposo durante el invierno, riega con moderación para permitir que la planta descanse. Empieza a regar de nuevo en primavera para «despertar» a la planta de su letargo.
El caladium prefiere un entorno húmedo. Rocía las hojas con regularidad, coloca un humidificador cerca o utiliza una bandeja de piedras con agua cerca de la planta para aumentar la humedad ambiente.
Si se cultivan en interiores en invierno, mantén el suelo más seco, ya que no les gusta tener demasiada agua cerca de su base durante su período de inactividad.
Temperatura
El caladium prefiere una temperatura de entre 18 y 26 °C. Evita que las corrientes de aire frío y los cambios bruscos de temperatura afecten a la planta.
Durante el invierno, cuando la planta está naturalmente inactiva, mantenla en un área que se mantenga por encima de los 15° C.
En primavera, las temperaturas muy cálidas de 23° C o más son útiles para «despertar» tu caladium más rápidamente.
Abono
Para obtener los mejores resultados, utiliza un fertilizante líquido para plantas de interior diluido a la mitad de la concentración recomendada una vez al mes durante la primavera y el verano.
No apliques nunca el abono a la tierra seca; asegúrate siempre de que la tierra esté húmeda antes de alimentar a tu planta. En los meses de otoño e invierno no se necesita ningún abono.
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Toxicidad
El caladium se considera tóxico para los animales domésticos y los seres humanos si se ingiere. Puede causar irritación en la boca y el estómago.