Los crisantemos (Chrysanthemum) florecen en tonos dorados, bronceados, blancos, rosados y rojos, y vienen en una variedad de tipos de flores. En este artículo veremos cómo propagar, cultivar crisantemos y sus cuidados.
Introducción
Hay algo mágico en ver cómo un paisaje cobra vida con nuevas flores y magníficos colores. Si estás buscando una nueva flor para tu jardín, no tienes que buscar mucho.
Los crisantemos, también conocidos por su apodo «mums», pueden alegrar cualquier espacio con sus coloridas flores.
Estas joyas pueden utilizarse de muchas maneras: como bloques de color masivo, combinados con hierbas ornamentales, entremezclados entre arbustos o en macetas para dar un toque de color.
Aquí tienes una guía para empezar a planificar y plantar los tuyos.
Dónde cultivar crisantemos
Como arbusto en el jardín delantero, los crisantemos te darán la bienvenida con sus brillantes flores cuando subas por tu camino.
Los crisantemos son una excelente planta de parterre y pueden cultivarse en el suelo casi en cualquier lugar. Sólo recuerda evitar los suelos arcillosos o arenosos.
Les gusta mucho el sol, así que busca una zona de tu jardín que reciba al menos 6 horas de sol en verano.
Planta los crisantemos en un lugar donde el agua no se estanque, eso no les gusta y pueden desarrollar hongos.
Cómo propagar y cultivar crisantemos
La mayor parte de la propagación de crisantemos se hace dividiendo las plantas grandes.
Para propagar los tuyos, cuando empiecen a aparecer los nuevos brotes elige los más jóvenes y que tengan al menos 10 cm de largo.
Intenta cortarlos lo más cerca de la planta madre, así podrás sacar esquejes con algunas pequeñas raíces.
Antes de volver a plantarlos, elimina todas las partes muertas o enfermas y deja solo las hojas que tienen buen aspecto.
Prepara una maceta con tierra mezclada con compost o abono y coloca uno o más esquejes, entierra la base del esqueje a uno o dos centímetros de profundidad.
A continuación riega hasta que el agua salga por los orificios de drenaje.
Deja los esquejes en un lugar donde reciban luz solar pero no directa, déjalos ahí hasta que veas nuevo crecimiento de hojas, cuando eso suceda es señal de que puedes trasplantarlos.
Cultivar crisantemos en maceta
- Los crisantemos crecen bien en macetas de más de 20 cm de diámetro.
- Colócalos en un lugar bien iluminado y protegido del viento fuerte.
- Al regar, solo riega la mezcla de la maceta, no las hojas. No regar en exceso.
- Retira las flores y hojas muertas una vez que aparezcan en la planta.
- Lo mejor de los crisantemos en maceta es que se pueden recortar después de que hayan florecido y plantado en el jardín.
Cuidados de los crisantemos
Luz solar
Los crisantemos necesitan mucho sol para crecer. Busca lugares soleados en tu jardín que estén protegidos del viento.
Clima
Los crisantemos crecen mejor en temperaturas frescas a suaves, pero también crecerán en los subtrópicos más suaves.
Suelo
Es esencial asegurar un buen drenaje, ya que a los crisantemos no les gusta tener los pies mojados.
Prosperan en casi cualquier tipo de suelo, que puedes mejorar con compost u otra materia orgánica. Si los cultivas en macetas, opta por una mezcla de primera calidad para macetas.
Riego
Riegua bien la tierra en verano, pero como los crisantemos son susceptibles al moho, deben mantenerse secos.
También se recomienda regar la tierra por la mañana y no por la tarde.
Abono
Aliméntalos con un abono líquido cada seis semanas para favorecer la floración. Ver: Cómo hacer y usar fertilizantes liquidos caseros.
Plagas y enfermedades
Los caracoles, las babosas y los pulgones adoran los crisantemos.
Son fáciles de eliminar a mano, pero si el número de pulgones se descontrola, rocíalos con un aceite de neem orgánico.
Ver: 5 recetas para combatir y prevenir Pulgones en las plantas.
Ver: Métodos naturales para evitar y combatir Babosas.
Mantenimiento
Para que el arbusto tenga muchas flores, pellizca las puntas de crecimiento cuando las plantas tengan 20 cm de altura.
Si el arbusto produce muchos brotes, elimina algunos de ellos para que las flores tengan más espacio de crecimiento.
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Si riegas demasiado las hojas, pueden oxidarse y desarrollar pequeños granos amarillos. Retira las hojas afectadas o, si es grave, utiliza un spray a base sulfato de cobre.